MOCA.- La violencia causada en el país por una desigual distribución de la riqueza que empobrece sobre todo a los jóvenes que son quienes protagonizan la mayoría de los delitos, debe atraer la atención de los grupos de poder económico, antes de que el país se torne invivible.
La advertencia fue hecha este lunes por Carlos Amarante Baret, dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), y miembro del equipo promotor del candidato presidencial de esa organización, Danilo Medina.
Estimó que aún cuando el doctor Marino Vinicio Castillo debía contar con algún elemento para sustentar que la criminalidad tiene motivaciones políticas, cree que el fenómeno se produce en un contexto donde el narcotráfico mueve más de US$70 mil millones al año en el mundo con los que corrompe instituciones y asimila a su causa jóvenes que subsisten en las barriadas entre altos niveles de pobreza.
Amarante Baret recordó que para atacar las causas de la violencia y la criminalidad el candidato Danilo Medina promete priorizar la creación de 400 mil empleos con el relanzamiento del aparato productivo y apoyar la continuación del crecimiento económico pero con redistribución equitativa.
“Los grandes ricos del país tienen que entender que el Estado, para hacer un país más seguro, tiene que redistribuir hacia abajo, pues sin redistribución el país se haría invivible”, previó Amarante Baret, entrevistado por los periodistas Manuel Jiménez y Ángel Barriuso en Propuesta Matinal, por el canal 45.
Agregó que una política efectiva contra la delincuencia requiere no sólo fortalecer las instituciones encargadas de perseguir el delito, sino también que los sectores económicamente poderosos entiendan que sin mejores condiciones de vida seguirá fértil el terreno para la reproducción de la delincuencia.
En el orden político consideró que hay un cambio gradual en la correlación de fuerzas entre su candidato Medina y el opositor Hipólito Mejía, quien según las encuestas recientes aventaja al candidato gubernamental.
Citó como ejemplo la marcha este domingo en la capital y el Distrito Nacional como una demostración de fuerte unidad al interior del partido de gobierno que contrasta con el desconcierto percibido por él dentro del PRD, amenazado por la sentencia bíblica “reino dividido no triunfa”.
En su opinión, también mejora la popularidad del gobierno a partir del pasado 16 de agosto, cuando el presidente Leonel Fernández comenzó a visitar los barrios capitalinos y a anunciar obras en las provincias de Santiago y Valverde.
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