Por Yanet Beltré
MIAMI.-El pronóstico no definitivo que le han dado los médicos a Francina Hungría no es favorable para ella, pues su ojo izquierdo aún no evoluciona de manera positiva.
Esas fueron las noticias que dio el padre de Francina, Frank Hungría, durante una entrevista vía telefónica que dio al elCaribe, desde el Jackson Memorial Hospital, donde se encuentra junto a su hija, quien fue baleada en la cara por delincuentes para despojarla de su vehículo el pasado 23 de noviembre.
Los especialistas luchan por salvarle el ojo izquierdo, pues el derecho lo perdió por los daños que le provocó la bala cuando fue atacada.
Hungría informó además que a veces a su hija le dan episodios de tristeza, “porque los médicos le hablan claro”, y ella se derrama en lágrimas. Asimismo informó que recientemente fueron a la capilla del hospital a pedir por su salud, y pidió que desde el país sigan orando por su hija.
Mañana los galenos que la atienden eliminarán la sangre coagulada que queda en el ojo izquierdo para estudiar luego qué pueden hacer. La ingeniera de 28 años saló del país hacia Miami el pasado viernes.
MIAMI.-El pronóstico no definitivo que le han dado los médicos a Francina Hungría no es favorable para ella, pues su ojo izquierdo aún no evoluciona de manera positiva.
Esas fueron las noticias que dio el padre de Francina, Frank Hungría, durante una entrevista vía telefónica que dio al elCaribe, desde el Jackson Memorial Hospital, donde se encuentra junto a su hija, quien fue baleada en la cara por delincuentes para despojarla de su vehículo el pasado 23 de noviembre.
Los especialistas luchan por salvarle el ojo izquierdo, pues el derecho lo perdió por los daños que le provocó la bala cuando fue atacada.
Hungría informó además que a veces a su hija le dan episodios de tristeza, “porque los médicos le hablan claro”, y ella se derrama en lágrimas. Asimismo informó que recientemente fueron a la capilla del hospital a pedir por su salud, y pidió que desde el país sigan orando por su hija.
Mañana los galenos que la atienden eliminarán la sangre coagulada que queda en el ojo izquierdo para estudiar luego qué pueden hacer. La ingeniera de 28 años saló del país hacia Miami el pasado viernes.