COLOMBIA.-Un cable secreto del Buró Federal de Investigaciones de Estados
Unidos, hoy desclasificado, revela que el gobierno de Estados Unidos
ordenó que se comprara cocaína al narcotraficante colombiano Pablo
Escobar, para tratar de investigar su capacidad para suplir la demanda
de esta droga.
Asimismo, los documentos desclasificados, que comenzó a publicar el periódico digital Verdad Abierta
de Colombia, revelan que el plan de persecución montado por el FBI
contra Pablo Escobar incluyó proponerle que instalar un laboratorio para
procesar cocaína en la República Dominicana, con la idea de que el capo
saliera de territorio colombiano, para apresarlo de inmediato.
Según explica Verdad Abierta, el cable fechado el 22 de mayo de 1985
explica una operación encubierta “a través de la cual se buscaba que
Pablo Escobar montara un laboratorio de cocaína en República Dominicana.
Para ello enviaron a un hombre desde Filadelfia, Estados Unidos, a
hacerle la propuesta”.
De acuerdo con la información obtenida por la División Newark, el
propósito de ese viaje era convencer a Escobar de "establecer" una
operación de procesamiento de cocaína en República Dominicana y para
seducirlo se dijo que esa operación estaría protegida por alguien que
“mantiene contactos de alto nivel dentro del Gobierno”.
Sin embargo, el cable no da cuenta del resultado de esa propuesta,
que estuvo monitoreada en Bogotá por funcionarios de la DEA. Al parecer,
el propósito era buscar la manera de sacar a Pablo Escobar del país,
para capturarlo.
Los cables también arrojan información sobre operaciones del FBI
tendientes a identificar a miembros de la organización de Pablo Escobar
asentados en Estados Unidos, mediante la compra de cocaína.
Pablo Emilio Escobar Gaviria, el más poderoso narcotraficante
colombiano, jefe del cártel de Medellín, nació en Rionegro el 1 de
diciembre de 1949, y murió en Medellín el 2 de diciembre de 1993).
A continuación el reportaje de Verdad Abierta.
Pablo Escobar: los papeles secretos del FBI (I)
El FBI acaba de desclasificar más de mil páginas de archivos secretos
sobre Pablo Escobar, que revelan cómo le siguieron los pasos desde que
empezó a lavar dólares en EE.UU hasta que se convirtió en el terrorista
más perseguido en Colombia
Mientras en los sectores populares de Medellín, Escobar era un
mecenas que construía barrios, se metía en los basureros y se hacía
pasar por un Robin Hood, en Estados Unidos ya se le relacionaba con el
tráfico de drogas.
Así lo confirma el primer informe del FBI sobre Escobar, realizado el
30 de marzo de 1984, cuando en Colombia el narco incursionaba en
política como suplente del representante a la Cámara, Jairo Ortega, por
el movimiento Alternativa Popular, que lideraba Alberto Santofimio
Botero.
Para saber más sobre Escobar, agentes del FBI con sede en Newark,
pidieron una autorización a sus superiores con el fin de desplegar una
investigación que incluía interceptaciones telefónicas y agentes
encubiertos que se harían pasar por vendedores de drogas o por hombres
dispuestos a lavar dinero para Escobar.
La operación la bautizaron: “Pablo Escobar: Tema de estupefacientes”
pero se cambió a “Operación Piscis” cuando el proyecto creció en su
alcance.
Por razones de seguridad, muchos de los nombres y detalles en los
documentos a los que tuvo acceso Verdadabieta.com fueron tachados y por
eso no es posible ver toda la información de algunas páginas. Las
identidades de los cómplices de Escobar, por ejemplo, son limitadas a
“hombres blancos” sin antecedentes penales.
Sin embargo, aparecen descripciones del capo a lo largo de los
documentos. Su entrada en la base de datos criminal del FBI señala:
“Pablo Emilio Escobar Gaviria; Fecha de Nacimiento: 1 de diciembre de
1949; pelo negro; ojos marrones; anteojos; Ocupación: Senador; Alias :
Pablo Escobar Carilla-Gariria, ‘Pablito’, ‘Emilio Gaviria’, Los Pablos
Associates”.
En dos cartas al director del FBI, agentes federales citaron un
artículo de Time Magazine en el cual Escobar se burla de la comparación
entre él y las FARC: “Se me puede acusar de ser un narcotraficante, pero
decir que estoy del mismo nivel que la guerrilla, así que realmente me
duele la dignidad de persona”.
Otras descripciones lo califican como “el tercer hombre más rico del
mundo”, “el narcotraficante más importante del mundo” o simplemente “un
narcotraficante con sede en Colombia”.
En Colombia también empezaron los señalamientos. Mientras Escobar
ganaba notoriedad en política, ese mismo año apareció el primer artículo
periodístico publicado por el diario El Espectador, en el que lo
relacionaban con el tráfico de drogas.
Su nombre, al igual que el de narcotraficantes como Gonzalo Rodríguez
Gacha, los hermanos Fabio, Jorge Luis y Juan David Ochoa, Carlos Ledher
Rivas, entre otros, estaban asociados a la creación de un grupo de
justicia privada conocido como Muerte a Secuestradores (Mas), que le
declaró la guerra a las guerrillas de las Farc y el M-19 por el
secuestro de Marta Nieves Ochoa, hermana menor de los Ochoa.
Este grupo es considerado en Colombia como una de las primeras
organizaciones paramilitares del país financiadas con dineros del
narcotráfico.
Por su parte, en Estados Unidos, Escobar ya empezaba a ser referenciado como el máximo líder del Cartel de Medellín.