CHARLOTTE.-
La primera Dama Michelle Obama hizo el martes la intervención
principal en la Convención Nacional Demócrata, un discurso cargado de
emoción a un acto inaugural diseñado para atizar el entusiasmo entre las
mujeres y las minorías cuyos votos son críticos para la reelección de
su esposo.
“Tenemos que trabajar como no lo hemos hecho nunca
antes”, declaró a los asistentes a la Convención, urgiéndolos a ayudar
al presidente Barack Obama a derrotar al candidato presidencial
republicano Mitt Romney. Pidió a sus partidarios que apoyen a su esposo
como cuando lo ayudaron a ganar la Casa Blanca hace cuatro años.
“
Y
tenemos que unirnos una vez más y apoyar juntos al hombre en quien
podemos confiar para que mantenga a este gran país marchando hacia
delante, mi esposo, nuestro Presidente, el presidente Barack Obama”.
En una historia en gran medida personal, la Primera Dama trató de
relacionar a su esposo con los trabajadores estadounidenses, hablando
sobre los humildes comienzos de su carrera, su decisión de renunciar a
una carrera altamente remunerada a favor del trabajo comunitario y el
servicio público, y sobre su vida como esposo y padre cariñoso.
Volvió a
rememorar la modesta crianza de su esposo a cargo de una madre soltera y
de sus abuelos, y luego su vida en común, un matrimonio joven con
deudas de préstamos estudiantiles más altas que su hipoteca.
“Hoy,
después de tantas luchas y triunfos y momentos que han puesto a prueba a
mi esposo en modos que nunca hubiera podido imaginar, he visto de cerca
que ser Presidente no cambia quién eres, sino que revela quién eres”,
indicó.
La Primera Dama dijo a los miles de asistentes congregados
en Time Warner Cable Arena que Obama había trabajado incansablemente
para hacer la economía más estable, mitigar los préstamos estudiantiles y
mejorar los servicios de salud pública.
“El cree que, cuando has
trabajado duro, y has progresado, y has logrado cruzar el umbral de la
oportunidad… no lo cierras detrás de ti… sino que alargas la mano, y das
a otros las mismas oportunidades que te ayudaron a llegar al éxito”,
subrayó.
Previamente, el alcalde de San Antonio, Julián Castro,
evocó la historia de su familia inmigrante y animó a aprovechar “las
oportunidades” que se presentan en el camino para alcanzar “la
prosperidad del mañana”.
Castro recordó a su abuela Victoria,
mexicana, que trabajó como criada, cocinera y cuidadora de niños en
EEUU, que además aprendió a leer y escribir sola en inglés y español.
Destacó que en tan sólo dos generaciones él y su hermano gemelo han
logrado ser políticos.
“Trabajó duro para dar a mi madre, su única
hija, una oportunidad en la vida, para que mi madre pudiera darnos una
mejor vida a mi hermano y a mí”, señaló el joven alcalde, que destacó
que “no importa quién seas o de dónde vengas, el camino es siempre
seguir adelante
0 comentarios:
Publicar un comentario
Deje su mensaje