SANTO DOMINGO.-(M/P noticias).- Mañana se cumplen 51 años de la desaparición física del tirano Rafael Leonidas Trujillo, mejor conocido como "chapita', muerto a tiros en una emboscada en la que participó de menera estelar un hijo de Moca, Antonio de la Maza y otros héroes del 30 de mayo de 1961, que con su vida hicieron florecer el gérmen de la democracia, después de 31 años de férrea dictadura, que troncó la libertad de un pueblo y produjo la muerte y desaparición de miles de dominicanos, que por el solo hecho de no compartir los lineamientos del régimen eran somentidos a la peor tortura, humillación, vejámenes y desaparición que se recuerden en la historia política.
De ese triste episodio de nuestra historia repúblicana los dominicanos de la época recuerdan como se vivió esos 31 años bajo ese regimen que consumó los más puros ideales de jóvenes prometedores a la grandeza y progreso de su patria.
Uno de los hechos de sangre más bochornoso en la dictadura de Trujillo, lo constituyó el horrendo crimen cometido contra las heroinas de Salcedo, Minerva, Teresa y Patria, pero, no tan solo eso, sino, que en esa era existió el centro de torturas más témido de americalatina, que se conoció como "La 40", donde se cometieron todos tipos de torturas.
También en esa época, la sociedad dominicana sufrió barbaries en familias y hogares, que el "jefe" antojadisamente haciendo acopio de su poder absoluto, ultrajaba de la forma más baja a la mujer dominicana, a la que humillaba cuando no queria entregarse para satisfacer su instinto animal sexual.
Otro de los tantos hechos y traiciones del tirano, no sólo en lo político, sino en relaciones personales, de compadres, ahijados, comadres e incluso fue perverso hasta contra su propio hermano, Petan Trujillo y otros de los cuales no confiabas.
Rafael Leonidas Trujillo Molina,, un dominicano que ingresa al ejército por necesidad, lleno de valentia en ese tiempo, logra por sus gestos de valor escalar posiciones, que abren pasos a las ambiciones desmedidas y de traición
La juventud dominicana, que desconoce casi en su totalidad lo que significó la dictadura de Rafael Leonidas Triujillo Molina, para la República Dominicana, debe ya pasado medio siglo escudriñar e investigar ese oscuro pasado de nuestra historia como país libre y soberado, para que jamás vuelva a repetirse.
El legado dejado por los actuantes héroes a las presentes y futuras generaciones, sus frutos deben seguir germinando en la conciencia de cada dominicano, para que cada día seamos mejores ciudadanos, respetando nuestra bandera tricolor, himno, escudo, en fin todos nuestros símbolos patrios, que nos identifican como nación libre y soberana.
Trujillo, fue asesinado un 30 de mayo de 1961, hace 51 años
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