Su actual directora reclama reconocimiento por la labor educativa importante que ha rendido el ZooDom en beneficio, especialmente, de los estudiantes de los centros públicos y privados que lo visitan. Se trata de un espacio en el que ya no predominan los barrotes.
El Parque Zoológico Nacional arquitecto Manuel Valverde Podestá celebrará el próximo 21 de agosto 37 años de labor, ocasión que, de acuerdo con su directora, Patricia Toribio, merece la pena celebrar.
Recordó que durante todo este tiempo, el parque ha rendido una labor educativa importante, en beneficio de la familia y especialmente de los estudiantes de los centros educativos públicos y privados que lo visitan.
Consideró que el aniversario del parque debe ser aprovechado para reflexionar sobre la misión de esa institución en la educación, la investigación y la conservación de especies en peligro.
También estimó que el Zoológico debe jugar un papel importante en la formación y extensión de la conciencia conservacionista entre los dominicanos.
La doctora Toribio explicó que el ZooDom fue fundado en 1975, y abierto al público el cinco de julio de ese año. Sin embargo, la idea surgió en abril de 1972, como una iniciativa de los arquitectos Manuel Valverde Podestá y Eugenio Pérez Montás.
Ambos profesionales, muy destacados por su labor urbanística durante el Gobierno del doctor Joaquín Balaguer, fueron quienes se lanzaron a la búsqueda de un espacio adecuado para la instalación de un parque zoológico que respondiera a las nuevas características de estos centros.
Con la llegada al país, el 24 de noviembre de 1974, de varios animales procedentes de Onahandja, África, y desde Estados Unidos, comenzó la recolección de las piezas que conformaron la primera colección del parque.
Estos nuevos animales se sumaron a los que poblaban el antiguo zoológico de la avenida Bolívar, entre los que se encontraban monos rehus, arañas, buitres, pumas, cocodrilos, loros, guacamayos, cacatúas, y tortugas, entre otros.
Montada esta primera colección, se fijó el cinco de julio de 1975 para la inauguración del Parque Zoológico Nacional, considerado entonces como uno de los más modernos de la región.
Y es que el parque Zoológico Nacional sustituyó el criterio clásico de parque de exhibición, con jaulas y barrotes, creando un ambiente de amplitud natural y semi libertad funcional y de gran belleza, en el que los animales conviven en espacios que reproducen sus hábitats naturales.
B La directora del ZooDom resaltó la profesionalidad y lealtad de todo el equipo de trabajo de todas las áreas del parque.
“Es un personal noble, entregado, que atiende la superficie considerada como una de las más grandes de un zoológico de América Latina”, sostiene Patricia Toribio.
Zoom
Vegetación
Tiene dos clases de vegetación: una en las zonas ambientadas para los animales, como La Gran Planicie. Los árboles allí no son nativos. Otra área está poblada de vegetación nativa secundaria, como los bosques de Campeche, el latifoliado, estrato arbóreo, palma de guano, palma real, almácigo, guáo, y guáyiga, entre otros.
El Parque Zoológico Nacional arquitecto Manuel Valverde Podestá celebrará el próximo 21 de agosto 37 años de labor, ocasión que, de acuerdo con su directora, Patricia Toribio, merece la pena celebrar.
Recordó que durante todo este tiempo, el parque ha rendido una labor educativa importante, en beneficio de la familia y especialmente de los estudiantes de los centros educativos públicos y privados que lo visitan.
Consideró que el aniversario del parque debe ser aprovechado para reflexionar sobre la misión de esa institución en la educación, la investigación y la conservación de especies en peligro.
También estimó que el Zoológico debe jugar un papel importante en la formación y extensión de la conciencia conservacionista entre los dominicanos.
La doctora Toribio explicó que el ZooDom fue fundado en 1975, y abierto al público el cinco de julio de ese año. Sin embargo, la idea surgió en abril de 1972, como una iniciativa de los arquitectos Manuel Valverde Podestá y Eugenio Pérez Montás.
Ambos profesionales, muy destacados por su labor urbanística durante el Gobierno del doctor Joaquín Balaguer, fueron quienes se lanzaron a la búsqueda de un espacio adecuado para la instalación de un parque zoológico que respondiera a las nuevas características de estos centros.
Con la llegada al país, el 24 de noviembre de 1974, de varios animales procedentes de Onahandja, África, y desde Estados Unidos, comenzó la recolección de las piezas que conformaron la primera colección del parque.
Estos nuevos animales se sumaron a los que poblaban el antiguo zoológico de la avenida Bolívar, entre los que se encontraban monos rehus, arañas, buitres, pumas, cocodrilos, loros, guacamayos, cacatúas, y tortugas, entre otros.
Montada esta primera colección, se fijó el cinco de julio de 1975 para la inauguración del Parque Zoológico Nacional, considerado entonces como uno de los más modernos de la región.
Y es que el parque Zoológico Nacional sustituyó el criterio clásico de parque de exhibición, con jaulas y barrotes, creando un ambiente de amplitud natural y semi libertad funcional y de gran belleza, en el que los animales conviven en espacios que reproducen sus hábitats naturales.
B La directora del ZooDom resaltó la profesionalidad y lealtad de todo el equipo de trabajo de todas las áreas del parque.
“Es un personal noble, entregado, que atiende la superficie considerada como una de las más grandes de un zoológico de América Latina”, sostiene Patricia Toribio.
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Vegetación
Tiene dos clases de vegetación: una en las zonas ambientadas para los animales, como La Gran Planicie. Los árboles allí no son nativos. Otra área está poblada de vegetación nativa secundaria, como los bosques de Campeche, el latifoliado, estrato arbóreo, palma de guano, palma real, almácigo, guáo, y guáyiga, entre otros.
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